Por Luis Ochoa, Director de Operación de TI y Ciberseguridad de Alestra

Luis Ochoa cuenta con más de 20 años de experiencia en Alestra. En un inicio, trabajó en las áreas de Transmisión, Voz, Datos y, desde el 2001, en Servidores y Aplicaciones. Tiene experiencia en Sistemas Operativos, Bases de Datos, Desarrollo de Sistemas, Diseño de Arquitecturas y Soluciones de Misión Crítica, Sistemas de Almacenamientos y Virtualización. Ha contribuido en las metodologías hoy en día utilizadas para preservar la Seguridad de la Información (ISO 27001), así como en las metodologías utilizadas actualmente para garantizar a nuestros clientes, la mejor atención para prevenir incidentes y resolverlos (ITIL). Es especialista en soluciones de Continuidad Operativa (Respaldos y DRP), Nube y Ciberseguridad.

En el actual contexto mundial marcado por el distanciamiento social, el comercio electrónico ha sido uno de los grandes aliados para satisfacer la adquisición de bienes. Hasta hace poco, el e-commerce en México aún generaba desconfianza entre los usuarios, sobre todo porque la experiencia de compra no era la misma que en una tienda física. Además, los clientes se mostraban reticentes a proporcionar sus datos bancarios en internet y por esto mismo, realizar transacciones desde dispositivos resultaba una imposibilidad.

Esta desconfianza, afortunadamente, se ha ido reduciendo gracias a los robustos ecosistemas digitales y de seguridad con los que hoy cuentan los sitios de compras en línea. De cierta forma, la pandemia también llevó a una mayor adopción; muchos de quienes, previo al 2020, sentían inseguridades ante las ventas por internet, tuvieron que adentrarse a las compras en línea debido al cierre de tiendas físicas.

Sea para seguir a flote o para incrementar sus ingresos, cada vez más empresas se suben a la era de la digitalización más rápido de lo planeado, lo que nos impulsa como país a escalar posiciones en el mundo de la conectividad. Tan sólo en el 2020, según datos de la Asociación Mexicana de Ventas Online, el comercio electrónico aumentó en un 81% con respecto al año anterior.

Siendo así, la pregunta que muchos tendrán es: ¿cuál es el secreto para una exitosa estrategia de ventas en línea? ¿Cómo funciona el ecosistema digital, desde que el cliente hace clic en el botón de compra, hasta que recibe su producto en casa?

No es tan sencillo como simplemente crear una página web; el comercio electrónico conlleva múltiples procesos digitales que se activan incluso antes de que los usuarios agreguen artículos en su carrito de compra. Por medio de tecnología en la nube, inteligencia artificial y automatización, los productos llegan a las casas de los compradores. Las soluciones digitales existentes permiten confirmar disponibilidad o inexistencias en tiempo real, asegurar y rastrear cargamentos con candados digitales, desde que salen de sus bodegas, hasta que llegan al punto final de forma automática e interconectada.

Y lo más importante: nada deja más tranquilos a los clientes que un modo de pago seguro. Detrás de los métodos de cobro existen múltiples filtros de seguridad antifraudes que validan las transacciones en segundos; algoritmos asignan a cada compra un número de seguimiento único. Tras sistemas de encriptación, verificación de dos pasos y hasta geolocalización se puede asegurar que la persona que haga la compra es la verdadera dueña de la cuenta.

Ahora, habrá quienes, tras múltiples garantías y certificados internacionales de seguridad de datos personales, aún sentirá desconfianza en los pagos digitales. Para ellos, la tecnología ha logrado unir las seguridades de un pago físico con la inmediatez y conveniencia de un pedido virtual. Hoy existen múltiples métodos de pago que, sin importar cuando y donde se realizan, se actualizan en el sistema automáticamente.

Es así como la seguridad tanto en tiendas físicas como virtuales es lo primero. En el contexto digital en específico, en cualquier compraventa se manejan un sinfín de datos sensibles que, de ser filtrados, llevan a pérdidas millonarias y una desconfianza general hacia una empresa. Se necesitan bases de datos seguras y códigos fuertes para blindar la operación ante cualquier ataque; cuando se trata de ciberseguridad, la mejor ofensiva es la defensiva.

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En esta época de incertidumbre, la necesidad de digitalización es latente. Entre más tarde una empresa en digitalizarse, más complicado será el cambio; la tecnología sigue avanzando con una velocidad increíble. El secreto para una digitalización de tienda exitosa y la estrategia más efectiva es aliarse a los expertos. Por medio del outsourcing una empresa puede acceder a las tecnologías más avanzadas y modernizar sus procesos con mayor facilidad a un menor costo.

En este proceso de transformación es muy valioso contar con el soporte de un aliado digital. En Alestra tenemos más de 25 años especializándonos en la transformación digital de empresas. Somos el vendedor número 1 en México de soluciones digitales con un énfasis importante en ciberseguridad; contamos con un Security Operation Center que nos permite estar al tanto de todos los elementos de seguridad que puedan afectar las operaciones de un cliente.

Por medio de un equipo altamente capacitado y tecnologías de vanguardia, se garantiza la rastreabilidad de inventarios y seguridad en pagos. Asimismo, se concentran múltiples soluciones para transformar cualquier desafío en oportunidad.

Desde nuestro inicio hasta la actualidad, en Alestra somos expertos en tecnología y hemos recorrido un largo camino, del cual estamos seguros surgirán nuevas oportunidades de negocio que favorecerá la competitividad, diversificación de productos y accesibilidad de tu negocio. #SomosExpertos